Historia de las fiestas de moros y cristianos del Palamó
Las Fiestas Patronales de Villafranqueza vienen celebrándose desde el año 1676, fecha en que se inauguró nuestra Iglesia Parroquial y se dedicó a la advocación de San José. Son, por lo tanto, de las más antiguas que se celebran en la ciudad de Alicante. En sus inicios y hasta que se abolieron los señoríos jurisdiccionales en España en el año 1811, y por lo tanto, los Condes de Villafranqueza perdieron la jurisdicción suprema que durante dos siglos habían ejercido sobre todo su término, las fiestas debieron ser muy modestas, con un solo día de festejos, que eran sufragados casi íntegramente por los sucesivos condes.
A partir de 1834 en que Villafranqueza se constituyó como Municipio independiente, la fiesta tomó mayor protagonismo e importancia, siendo el Alcalde y los Concejales del Ayuntamiento palamonero, los encargados de recorrer todas las casas para recoger donativos, que junto a la subvención municipal, servían para sufragar los gastos de las fiestas.
Fiestas que comenzaban a las nueve de la noche del día 17 de Marzo, con un repique general de campanas, salva de morteretes, música y dulzaina para anunciar su inicio y concluían a las diez de la noche del día 19 con disparo de un castillo de fuegos artificiales.
Durante todo el S. XIX y parte del S. XX las fiestas palamoneras (según se detalla en antiguos programas de fiestas), estaban supeditadas principalmente a actos religiosos, y a pasacalles y conciertos ofrecidos por la banda del pueblo. Como dato anecdótico hay que destacar que las fiestas de Villafranqueza del año 1900 costaron 598 pesetas con 50 céntimos, de las que 451 pesetas con 64 céntimos fueron aportadas por los vecinos a través de donativos y 146 pesetas con 86 céntimos fueron aportadas por el Ayuntamiento como subvención municipal.
Las fiestas del Palamó siempre se celebraron con gran animación y tuvieron gran auge en toda la comarca, a pesar de la modestia económica que las caracterizaba por ser una localidad pequeña. En las décadas de los 40 a 60 del siglo pasado, en Villafranqueza se vivió una época de gran esplendor festero, a pesar de que la localidad hacía un tiempo que se había anexionado a Alicante y por lo tanto no contaba con ninguna ayuda municipal.
En esa época, que muchos palamoneros aún recuerdan, la fiesta patronal se vivía a tope los tres días y el programa de festejos estaba repleto de actos populares, como carreras de carretillas, de caballos que corrían desde la Cruz (actual barrio de la Virgen del Remedio) hasta la entrada del pueblo, de bicicletas, de sacos, cucañas, cintas, ollas, etc.
La dulzaina y el tamboril con los cabezudos, la banda de música “La Amistad” y la orquesta de Sellés y Vicente Matas animaban los días y las noches, y sobre todo las cabalgatas de carrozas, construidas íntegramente por los inolvidables Juanito Asensi y Lorenzo Fornet entre otros, y la gracia y el ingenio de mujeres como Pilar, Alejandrina, Mercedes, María, Carmen y muchas más, hacían las delicias de propios y visitantes. Los actos religiosos como la Misa con solemne sermón en honor a San José y la Procesión completaban los actos.
Durante décadas la fiesta se fue celebrando sin grandes problemas gracias a la inestimable labor de personas como Antonio Trives, Juan Antonio Tortosa, Manuel Teruel, Vicente Climent, Vicente Guijarro y muchos otros que formaron en la Comisión de Fiestas durante muchos años, hasta finales de la década de los sesenta.
La falta de subvenciones municipales y la retirada por motivos de edad de personas vinculadas a las fiestas patronales, desde siempre, motivó que se creara un gran vacío de organización que a punto estuvo de propiciar la desaparición de las fiestas de San José de Villafranqueza.
Estas circunstancias obligaron a que los jóvenes del pueblo tomaran obligatoria-mente el relevo. La falta de experiencia y sobre todo de recursos económicos, originó que las fiestas se fuesen deteriorando cada vez más.
Hasta llegar así al año 1975, en que a instancias del Alcalde Pedáneo, D. Rafael Brotons, se propuso en una reunión, organizada por la Comisión de Fiestas (en ese momento formada por gente muy joven) presidida por José María Soler Amorós, y compuesta por José Alfredo, Santiago Valdés, Vicente Iborra, Antonio Martinez, Pedro Vicente de Juan, Francisco Cerdá, José Antonio Orts..., etc., que las entidades festeras que existían en el pueblo en ese año, debían de participar de forma más activa. Para que la fiesta no decayera más, se apuntó en esa reunión la posibilidad de sacar en la cabalgata, seis escuadras de Moros y Cristianos, pertenecientes a las Barracas “Els Jovenets” (que eran componentes y amigos de la Comisión de Fiestas), “No volien pero han firmat” y Peña “Los Arpes”.
La novedad de los Moros y Cristianos gustó tanto y llamó de tal manera la atención en el pueblo, que pronto prendió la afición a esta nueva faceta festera. Este fue sin duda el punto de arranque para que al año siguiente comenzase oficialmente la celebración de los Moros y Cristianos de El Palamó.
En el año 1976 desfilaron oficialmente cuatro entidades festeras: “No volien pero han firmat”, con cuatro filadas; Peña “Los Arpes”, con dos filadas.
“Els Jovenets”, con cuatro filadas, y “Els Palamoners”, que ese año se incorporaba a la fiesta, con seis filadas de mayores y una comparsa infantil compuesta por cuarenta niños.
A estas filadas les acompañó las bandas de música de Villafranqueza, San Vicente, Agost, San Juan, Campello y Rojales.
En este primer año oficial de Moros y Cristianos se llegó a realizar incluso las Guerrillas y Embajadas, aprovechando la portada en forma de castillo que la barraca “No volien pero han firmat”, había instalado en la Ermita de San Antonio, y en el mes de Septiembre, se realizó el primer “Medio Año”.
Ya se podía decir que en ese año de 1976, se habían consolidado estas fiestas en nuestro pueblo, puesto que al haber sido un éxito de participación y público, se había puesto la primera piedra para que en años sucesivos se fueran creando nuevas comparsas, como así sucedió y se detallan a continuación:
Por el bando cristiano: en 1977 cambiaron de nombre “Els Jovenets” por “Pescadors i Llauradors”. En el 78 “Corazón de León”; en el 79 “Contrabandistas” y “Los Drogas”; en 1982 fueron “San Jorge” y “Tibidorios”. En 1992 se unieron “Caballeros del Cid” y “Halcones Reales”, estas dos últimas nacieron de la desaparición ese mismo año de “Los Drogas”. Después fueron los “Corsarios del Palamó” en el año 2009 y “Caballeros del Norte” en 2016. Por ultimo, la comparsa “Guerreros” se unió el pasado 2018.
Por el bando Moro: “Negros Papues” y “Els Ximos” en 1977. Aunque estos últimos no desfilaron oficialmente hasta el 78. Hasta el año 1991 no entraron los “Tuareg” y al año siguiente fueron los “Abbasies”. En el 94 y el 95 se sumaron al bando de la media luna, “Alí-Ben-Yusuf” y “Bereberes” respectivamente. “Sarracenos” en 1999; y “Moros Viejos" en 2008 y en 2014, "Yemeníes". Por último, en 2018, se unieron los “Marrocs”.
Por desgracia no todas estas entidades continúan en la actualidad, ya que por distintos motivos fueron desapareciendo de nuestras fiestas, como los “Tibidorios” y “Corazón de León” que tan solo duraron dos y tres años respectivamente; o en el 92 los antes mencionados “Drogas”.
Y la peor racha negativa fue del 2002 al 2004, con los “Bandoleros” el primer año, “Alí-Ben-Yusuf” y “Bereberes” en el 2003 y “Caballeros del Cid” en 2004. Por último, fueron los "Sarracenos" los que abandonaron en el año 2013, y este año pasado los Caballeros del Norte, como hemos comentado anteriormemte.
De igual manera que ocurrió con las comparsas y kábilas, con el paso de los años se fueron introduciendo en la fiesta los distintos actos que hoy en día conforman nuestro programa festero, los cuales se resumen a continuación:
En el año 1978 se realizó por primera vez la “Presentación de Abanderadas”; fue un acto que se hizo conjuntamente con lapresentación de las Reinas de las Fiestas Patronales, en el ya desaparecido Cine Cervantes.
En 1982 se introdujo la figura del “Alcalde de Fiestas”, siendo el pionero el señor D. Manuel Marhuenda.
El año 1983 se realizó por primera vez el “Desfile Infantil”, acto que se dejó de realizar por falta de participación.
En el 84 hubo por primera vez un “Pregón de Fiestas”, que corrió a cargo del ilustre periodista alicantino D. Fernando Gil Sanchez.Fue en el 86 cuando se introdujo al programa el “Avís de Festa” y el 95 contó con un nuevo acto, el cual fue la “Entrada de Bandas”.
Al año siguiente en 1996, se recupera para las Fiestas Patronales, la tradicional "Alborada" en honor a San José. Y ya en el año 2007 se introducen los actos de nuestras fiestas, las “Entraetas”, que se realizan el fin de semana antes, en el Avís de Festa y la Embajada Humorística denominada, “La Toma de la Paloma”. Finalmente, y siendo en 2015 el primer año, se ha introducido en el programa oficial de actos el llamado "Desfile del pregón".
Como hechos destacables de las fiestas palamoneras, cabe reseñar que en el año 1984, se constituyó una nueva Comisión de Fiestas Patronales, presidida por D. José Giner Tortosa, la cual se encargó de construir íntegramente el primer castillo para las embajadas con que contó Villafranqueza. Naturalmente se nombraron a los primeros Embajadores oficiales para ese ejercicio, los señores D. Joaquín Rosario y D. Francisco López.
Pero sin duda la novedad más destacable e importante se produjo en el año 1985, por la repercusión del futuro de las fiestas de Villafranqueza. Fue la creación de la Asociación de Fiestas de Moros y Cristianos “El Palamó”, el 31 de Mayo, y la posterior aprobación de sus Estatutos el 14 de Junio en Asamblea General de Comparsas.
Siendo el primer Presidente D. Antonio Mas Torregrosa y la primera Abanderada de la misma, la señorita Patricia Ana Espinosa Fernández.
A partir de este momento, la fiesta de Moros y Cristianos, pasó a ser organizada por esta nueva Asociación, en vez de por la Comisión de Fiestas Patronales, con la que se trabaja siempre mano a mano, para el engrandecimiento de nuestras queridas Fiestas de San José. También en esas fechas se confeccionó su actual escudo oficial, el cual realizó, D. Antonio Fuentes Martínez.
Otro dato importante es que el año 1988, es el último de las Reinas y Damas en Villafranqueza, ya que al término de las Fiestas de San José, la Comisión de Fiestas Patronales dimitió disolviéndose indefinidamente. Este hecho obligó a la recién creada Asociación de Moros y Cristianos, a hacerse cargo de la organización total de las fiestas, estableciéndose como norma obligatoria, que cada dos años la fiesta la gestionaran dos comparsas, comenzando por sorteo “Los Arpes” y “Los Drogas”.
En el 93, un nuevo castillo para las embajadas, construido por los talleres del Ayuntamiento de Alicante, vino a sustituir al que durante diez años fue el escenario de tantas embajadas palamoneras.
En el año 1999 se crea en Alicante la Federación Alicantina de Moros y Cristianos (FAMYC), a la cual se integra de pleno derecho Villafranqueza, junto a los barrios de Altozano, José Antonio, Rebolledo y San Blas.
Ya en el año 2001, la Asociación de Fiestas presidida por D. Filiberto Sala Aracil y tras una subvención del Ayuntamiento de Alicante, construyó en tres semanas la actual fortaleza en la que se representan nuestras maravillosas Embajadas y Capitulaciones de Moros y Cristianos.
En el 2005, destacar que la Asociación de Fiestas de Moros y Cristianos, deja de estar regida por dos comparsas cada dos años, pasando a realizarse elecciones con mandatos de cuatro años. También este mismo año, se vuelve a crear la Comisión de Fiestas Patronales en Honor a San José de Villafranqueza, siendo el Presidente D. Antonio Cáceres Prats. A partir de este momento, la comisión vuelve a organizar todos los actos relacionados con las Fiestas Patronales.
Actualmente y con 39 años de Moros y cristianos, la Asociación de Fiestas está integrada por catorce entidades, siete para los seguidores de la Cruz, y otras tantas para el bando de la Media Luna, con un total de festeros de medio millar, que cada año ponen toda la ilusión, imaginación y trabajo para que esta fiesta tan hermosa, dedicada a San José, no decaiga, sino que se supere en cada edición.
Actualmente la asociación esta formada por quince entidades, siete por el bando cristiano (Peña Los Arpes, Contrabandistas, Pescadors i Llauradors, Caballeros Templarios, Halcones Reales,Corsarios y Guerreros y por el bando moro ocho entidades (Els Palamoners, Negros Papues, Els Ximos, Tuareg, Abbasies, Moros Viejos, Yemenies y Marrocs), con seiscientos festeros en total.
Y seguimos trabajando para hacer más grande nuestras fiestas.
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